Paseo 17. La Lírica en el Renacimiento Español
Paseo XVII
LA LÍRICA EN EL RENACIMIENTO ESPAÑOL
Con los REYES CATÓLICOS España alcanza su Unidad y con CARLOS V, el Imperio.
Los descubrimientos geográficos dan al español una fuerza inmensa. La imprenta y las universidades multiplican el saber.
Las guerras con Italia facilitan el contacto con los valores espirituales del Renacimiento.
Un poeta barcelonés, Juan BOSCÁN, empezó a imitar los versos a estilo italiano (de 7 y 11 sílabas) y convenció para que hiciera lo mismo a su amigo Garcilaso de la Vega.
SIGLO XVI.- GARCILASO DE LA VEGA (1503-1536), prototipo de poeta imperial de España aseguró el triunfo del Renacimiento italiano.
Familia: Aristocrática, de Toledo.
Armas: Carrera brillantísima: Tenía treinta y tres años y era ya General (Maestre de Campo) del ejército del Emperador al morir, en Fréjus de Provenza, en una acción de guerra.
Cultura: Todo el saber clásico grecolatino y los poetas del Renacimiento italiano.
Importa de Italia:
FORMAS, versos (de 7 y 11 sílabas), estrofas (lira, silva, octava real)
TEMAS, el amor espiritual (Petrarca), el bucolismo (Sannazaro)
Obras: Muy pocas: once poemas extensos (églogas, elegías, epístolas, canciones) y treinta y ocho sonetos. Bastan para que se considere a Garcilaso como el príncipe de la poesía castellana.
A la flor de Gnido
[SI MI LIRA TUVIESE MUCHA FUERZA]
Si de mi baja lira
tanto pudiese ti son, que en un momento aplacase la ira
del animoso viento,
y la furia del mar y el movimiento;
y en ásperas montañas
con el süave canto enterneciese
las fieras alimañas,
los árboles moviese,
y al son confusamente los trajese;
[...NO CANTARÍA LA CRUELDAD DE LA GUERRA]
no pienses que cantado
sería de mí, hermosa flor de Gnido,
el fiero Marte airado,
a muerte convertido,
de polvo y sangre y de sudor teñido;
ni aquellos capitanes
en las sublimes ruedas colocados,
por quien los alemanes
el fiero cuello atados,
y los franceses van domesticados.
[ . . . SINO LA DE TU BELLEZA]
Mas solamente aquella
fuerza de tu beldad sería cantada
y alguna vez con ella
también sería notada
el aspereza de que estás armada:
y como por ti sola,
y por tu gran valor y hermosura,
convertida en vïola,
llora su desventura
el miserable amante en tu figura.
[QUE TIENE A MI AMIGO MORIBUNDO]
Hablo de aquel cativo,
de quien tener se debe más cuidado,
que está muriendo vivo,
al remo condenado,
en la concha de Venus amarrado.
[SIN GANAS DE MONTAR A CABALLO]
Por ti, como solía,
del áspero caballo no corrige
la furia y gallardía,
ni con freno le rige
ni con vivas espuelas ya le aflige
[NI DE LUCHAR]
Por ti, con diestra mano
no revuelve la espada presurosa,
y en el dudoso llano
huye la polvorosa
palestra como siempre ponzoñosa.
[NI DE CANTAR]
Por ti, su blanda musa,
en lugar de la cítara sonante
tristes querellas usa,
que con llanto abundante
hacen bañar el rostro del amante.
[SE HA VUELTO ESQUIVO]
Por ti, el mayor amigo
le es importuno, grave y enojoso;
yo puedo ser testigo,
que ya del peligroso
naufragio fui su puerto y su reposo.
[Y VA A PERDER LA RAZÓN]
Y agora, en tal manera
vence el dolor a la razón perdida,
que, ponzoñosa fiera,
nunca fue aborrecida
tanto como yo del, ni tan temida.
[TEN PIEDAD DE ÉL]
No fuiste tú engendrada
ni producida de la dura tierra;
no debe ser notada
que ingratamente yerra
quien todo el otro error de sí destierra.
[MIRA QUE LA NINFA ANAXÁRATE SE CONVIRTIÓ EN MÁRMOL POR SER DESDEÑOSA.]
No quieras tú, señora,
de Némesis airada las saetas
probar, por Dios, agora;
baste que tus perfetas
obras y hermosura a los poetas
den inmortal materia,
sin que también en verso lamentable
celebren la miseria
de algún caso notable
que por ti pase triste y miserable.
RECUERDOS DEL POETA:
a) LA FIGURA DE GARCILASO DE LA VEGA. Fue gran poeta, gran soldado y persona de agradable trato. Vivió, luchó, se enamoró y murió muy joven. Dejó por todas partes un rastro de simpatía y admiración. Un poeta de la Generación del 27, Alberti, escribió:
Si Garcilaso volviera
yo sería su escudero
que gran caballero era.
......................................
¡Qué dulce oírle, guerrero,
al borde de su estribera!
En la mano mi sombrero:
que buen caballero era.
b) Recordemos de Garcilaso su soneto autobiográfico, su poesía bucólica y su canción amorosa. He aquí otro aspecto de su obra:
c) A LA FLOR DE GNIDO. Garcilaso tenía un amigo llamado Mario Galeota, el cual estaba enamorado de una dama bellísima que vivía en el Gnido, barrio de Nápoles. Esta dama no hacía caso de Mario. Entonces Garcilaso, bromeando, le pide que sea compasiva con él.
GARCILASO asegura la influencia renacentista italiana en la poesía española.
Apius Claudius Caecus...
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